viernes, 27 de marzo de 2009

Resolviendo problemas


El Gran Maestro y el Guardián se dividían la administración de un monasterio Zen.
Cierto día, el Guardián murió y fue preciso sustituirlo.
El Gran Maestro reunió a todos los discípulos para escoger quién tendría la honra de trabajar directamente a su lado.
- Voy a presentarles un problema -dijo el Gran Maestro- y aquél que lo resuelva primero, será el nuevo guardián del Templo.
Terminado su corto discurso, colocó un banquito en el centro de la sala.
Encima estaba un florero de porcelana, seguramente carísimo, con una rosa roja que lo decoraba.
-Este es el problema -dice el Gran Maestro. -Resuélvanlo.
Los discípulos contemplaron perplejos el “problema”, por lo que veían los diseños sofisticados y raros de la porcelana, la frescura y la elegancia de la flor.
¿Qué representaba aquello?
¿Qué hacer?
¿Cuál sería el enigma?
Pasó el tiempo sin que nadie atinase a hacer nada salvo contemplar el “problema”, hasta que uno de los discípulos se levantó, miró al maestro y a los alumnos, caminó resolutamente hasta el florero y lo tiró al suelo, destruyéndolo.
- ¡¡Al fin alguien lo hizo !!! - exclamó el Gran Maestro-.
Empezaba a dudar de la formación que les hemos dado en todos estos años.
Usted es el nuevo guardián.
Al volver a su lugar el alumno, el Gran Maestro explicó:
- Yo fui bien claro: dije que ustedes estaban delante de un “problema”.
No importa cuán bello y fascinante sea un problema, tiene que ser eliminado.
Un problema es un problema; puede ser un florero de porcelana muy caro, un amor que ya no tiene sentido, un camino que precisa ser abandonado, por más que insistimos en recorrerlo porque nos trae confort…
-…. “Solo existe una manera de lidiar con un problema”: atacándolo de frente.
En esas horas, no se puede tener piedad, ni ser tentado por el lado fascinante que cualquier conflicto acarrea consigo.
Recuerda que un problema, es un problema.
No tiene caso tratar de “acomodarlo” y darle vueltas, si al fin y al cabo ya no es otra cosa más que “Un Problema”.
Déjalo, hazlo a un lado y continúa disfrutando de lo hermoso y lo que vale en la vida.
No huyas de él… acaba con él.

miércoles, 25 de marzo de 2009

Los fueguitos


"Un hombre de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo.
A la vuelta contó.
Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana.
Y dijo que somos un mar de fueguitos.
-El mundo es eso -reveló-
Un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás.
No hay dos fuegos iguales.
Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende."
Eduardo Galeano
¿Que clase de fueguito eres tu?

viernes, 20 de marzo de 2009

El buscador


Esta es la historia de un hombre al que yo definiría como buscador.
Un buscador es alguien que busca.
No necesariamente es alguien que encuentra.
Tampoco es alguien que sabe lo que está buscando.
Es simplemente alguien para quien su vida es una búsqueda.

Un día nuestro Buscador sintió que debía ir hacia la ciudad de Kammir.
Él había aprendido a hacer caso riguroso a esas sensaciones que venían de un lugar desconocido de sí mismo, así que dejó todo y partió.
Después de dos días de marcha por los polvorientos caminos, divisó Kammir a lo lejos, pero un poco antes de llegar al pueblo, una colina a la derecha del sendero le llamó la atención.
Estaba tapizada de un verde maravilloso y había un montón de árboles, pájaros y flores encantadoras.
Estaba rodeaba por completo por una especie de valla pequeña de madera lustrada, y una portezuela de bronce lo invitaba a entrar
. De pronto sintió que olvidaba el pueblo y sucumbió ante la tentación de descansar por un momento en ese lugar.
El Buscador traspasó el portal y empezó a caminar lentamente entre las piedras blancas que estaban distribuidas como por azar entre los árboles.
Dejó que sus ojos, que eran los de un buscador, pasearan por el lugar... y quizá por eso descubrió, sobre una de las piedras, aquella inscripción.
“Abedul Tare, vivió 8 años, 6 meses, 2 semanas y 3 días”.
Se sobrecogió un poco al darse cuenta de que esa piedra no era simplemente una piedra.
Era una lápida, y sintió pena al pensar que un niño de tan corta edad estaba enterrado en ese lugar…
Mirando a su alrededor, el hombre se dio cuenta de que la piedra de al lado también tenía una inscripción.
Al acercarse a leerla, descifró: “Lamar Kalib, vivió 5 años, 8 meses y 3 semanas”.
El buscador se sintió terriblemente conmocionado.
Este hermoso lugar era un cementerio y cada piedra una lápida.
Todas tenían inscripciones similares:
un nombre y el tiempo de vida exacto del muerto, pero lo que lo contactó con el espanto, fue comprobar que, el que más tiempo había vivido, apenas sobrepasaba 11 años.
Embargado por un dolor terrible, se sentó y se puso a llorar.
El cuidador del cementerio pasaba por ahí y se acercó, lo miró llorar por un rato en silencio y luego le preguntó si lloraba por algún familiar.
- No, ningún familiar – dijo el buscador - Pero... ¿qué pasa con este pueblo?
¿Qué cosa tan terrible hay en esta ciudad?
¿Por qué tantos niños muertos enterrados en este lugar?
¿Cuál es la horrible maldición que pesa sobre esta gente, que lo ha obligado a construir un cementerio de niños?
El anciano cuidador sonrió y dijo:
"Puede usted serenarse, no hay tal maldición, lo que pasa es que aquí tenemos una vieja costumbre.
Le contaré...
Cuando un joven cumple quince años, sus padres le regalan una libreta, como ésta que tengo aquí, colgando del cuello, y es tradición entre nosotros que, a partir de entonces, cada vez que uno disfruta intensamente de algo, abra la libreta y anote en ella:
a la izquierda, qué fue lo disfrutado…, a la derecha, cuanto tiempo duró ese gozo.
¿Conoció a su novia y se enamoró de ella?
¿Cuánto tiempo duró esa pasión enorme y el placer de conocerla?
¿Una semana, dos?
¿tres semanas y media?
Y después… la emoción del primer beso, ¿cuánto duró?
¿El minuto y medio del beso?
¿Dos días?
¿Una semana?
¿Y el embarazo o el nacimiento del primer hijo?
¿y el casamiento de los amigos?
¿y el viaje más deseado?
¿y el encuentro con el hermano que vuelve de un país lejano?
¿Cuánto duró el disfrutar de estas situaciones? ¿horas? ¿días?…
Así vamos anotando en la libreta cada momento, cada gozo, cada sentimiento pleno e intenso... y cuando alguien se muere, es nuestra costumbre abrir su libreta y sumar el tiempo de lo disfrutado, para escribirlo sobre su tumba.
Porque ése es, para nosotros, el único y verdadero tiempo vivido."
Jorge Bucay

martes, 17 de marzo de 2009

La gratitud


"El hombre que estaba tras el mostrador, miraba la calle distraidamente.
Una niñita se aproximó al negocio y apretó la naricita contra el vidrio de la vitrina.
Los ojos de color del cielo brillaban cuando vio un determinado objeto.
Entró en el negocio y pidió para ver el collar de turquesa azul.
- "Es para mi hermana. ¿Puede hacer un paquete bien bonito?".- dice ella.
El dueño del negocio miró desconfiado a la niñita y le preguntó:
¿Cuánto dinero tienes?
Sin dudar, ella sacó del bolsillo de su ropa un pañuelo todo atadito y fue deshaciendo los nudos. Los colocó sobre el mostrador y dijo feliz: - "¿Eso da?".
Eran apenas algunas monedas que ella exhibía orgullosa.
- "Sabe, quiero dar este regalo a mi hermana mayor.
Desde que murió nuestra madre, ella cuida de nosotros y no tiene tiempo para ella.
Es el cumpleaños de ella y tengo el convencimiento que quedará feliz con el collar que es del color de sus ojos".
El hombre fue para la trastienda, colocó el collar en un estuche, envolvió con un vistoso papel rojo e hizo un trabajado lazo con una cinta verde.
- "Tome, dijo a la niña. Lleve con cuidado".
Ella salió feliz corriendo y saltando calle abajo.
Aún no acababa el día, cuando una linda joven de cabellos rubios y maravillosos ojos azules entró en el negocio.
Colocó sobre el mostrador el ya conocido envoltorio deshecho e indagó:
- "¿Este collar fue comprado aquí?- "Si señora".
- "¿Y cuánto costó?- "Ah!", - habló el dueño del negocio.
- "El precio de cualquier producto de mi tienda es siempre un asunto confidencial entre el vendedor y el cliente".
La joven continuó: - "Pero mi hermana tenía solamente algunas monedas.
El collar es verdadero, ¿no? Ella no tendría dinero para pagarlo".
El hombre tomó el estuche, rehizo el envoltorio con extremo cariño, colocó la cinta y lo devolvió a la joven.
- "Ella pagó el precio más alto que cualquier persona puede pagar.
"Ella dio todo lo que tenia"
El silencio llenó la pequeña tienda y dos lágrimas rodaron por la faz emocionada de la joven en cuanto sus manos tomaban el pequeño envoltorio.
La verdadera donación es darse por entero, sin restricciones.
La gratitud de quien ama no coloca límites para los gestos de ternura.
Sé siempre agradecido pero no esperes el reconocimiento de nadie.
Gratitud con amor no sólo reanima a quien recibe, como reconforta a quien ofrece.
"Piensa en eso".
"La vida mejora con cada día que pasa siempre y cuando demuestres una actitud positiva".
Autor: Desconocido

sábado, 14 de marzo de 2009

No te rindas


No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.
No te rindas,
por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.
Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos
Desplegar las alas E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños
Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque esta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero
Mario Benedetti

¿Y tu sabes amar?


Yo estoy aprendiendo…
Yo estoy aprendiendo a aceptar a las personas, aún cuando ellas me defrauden, aún cuando se salgan del ideal que yo tengo de ellas, y aún cuando ellas me hieran con palabras ásperas o acciones irreflexivas.
Es difícil de aceptar a las personas así como ellas son, y no como yo quiero que sean.
Es difícil, muy difícil, pero estoy aprendiendo, porque yo estoy aprendiendo a amar.
Yo estoy aprendiendo a escuchar.
Para escuchar con los ojos, con los oídos, con el alma, y con todos los sentidos, lo que dice el corazón, lo que dicen los hombres caídos, los ojos tristes, y las manos inquietas.
Para escuchar el mensaje que esconden las palabras, para descubrir la angustia guardada, la inseguridad enmascarada, y la soledad encubierta.
Para penetrar en la sonrisa falsa, la felicidad simulada, y la adulación exagerada.
Para descubrir el dolor de cada corazón, para descifrar el porqué de las lágrimas.
Poco a poco, yo estoy aprendiendo a amar.
Yo estoy aprendiendo a perdonar, porque el amor perdona, limpia las heridas, y borra las cicatrices que la incomprensión e inseguridad grabaron en mi corazón herido.
El amor alivia la herida que dejaron los pensamientos dolorosos, y no cultiva las ofensas con piedades y autocompasión.
El amor perdona, da alivio, y extingue todo el dolor en el corazón.
Yo, paso a paso, estoy aprendiendo a perdonar y a amar.
Yo estoy aprendiendo a descubrir el valor dentro de cada vida.
Estoy aprendiendo que el afecto y la aceptación, son necesarias para soportar las experiencias duras vividas a lo largo de los años.
Yo estoy aprendiendo a ver el alma de las personas, y las posibilidades que Dios les dio.
Yo estoy aprendiendo, aunque tropezando, yo estoy aprendiendo.
Estoy aprendiendo a poner de lado mis propios dolores, mis intereses, mi ambición y mi orgullo, cuando éstos impiden el bienestar y la felicidad de alguien.
¡Pero, cómo es de lento aprender! , y ¡cómo es de difícil amar!
Aún así, yo estoy aprendiendo a amar.

jueves, 12 de marzo de 2009

La fiesta del doble siete



La Fiesta del Doble Siete en China,
que cae en el séptimo día del séptimo
mes del calendario lunar,
es una fiesta tradicional llena de romanticismo.
Normalmente cae en agosto del calendario gregoriano.
Esta fiesta se celebra a mediados de verano
cuando la hierba y los árboles
tienen un verde intenso.
Por la noche cuando el cielo está lleno de estrellas,
la gente contempla la Vía Láctea
que se extiende de norte a sur.
En cada uno de sus lados,
hay una estrella brillante.
Sus nombres son el "Pastor de vacas"
y la "Doncella que saluda",
y sobre ellas existe una bonita historia
que se ha transmitido de generación en generación.
Hace mucho tiempo,
había un hombre muy honesto y bueno
que se llamaba Niu Lang
(el pastor de vacas).
Sus padres murieron cuando era sólo un niño.
Más tarde, su cuñada lo echó de casa
y tuvo que ganarse la vida
criando animales y cultivando la tierra.
Un día, una hada del cielo,
Zhi Nu (la doncella que saluda),
se enamoró de él,
por lo que vino secretamente
a la tierra y se casó con él.
Llevaron una vida feliz
y tuvieron un hijo y una hija.
Desgraciadamente, el Dios del Cielo
descubrió lo que había sucedido
y ordenó a la Reina Madre de los Cielos
del Oeste que trajera de vuelta a la doncella.
Con la ayuda del ganado celestial,
el pastor voló al cielo con su hijo y su hija.
Cuando estaba a punto de reunirse con su mujer,
la Reina Madre se sacó
una de sus horquillas de oro
y creó un rayo que separó para siempre a la pareja.
Sin embargo, su lealtad
impresionó a las urracas
que construyeron un puente
para que pudieran cruzar el rayo
y reunirse una vez más.
A partir de entonces,
la Reina Madre les permitió reunirse
el día séptimo del séptimo mes lunar.
Por lo que el día de su encuentro
se llama "Qi Xi" (doble siete).

miércoles, 11 de marzo de 2009

Amate como mujer


Nunca te permitas sentirte sola, puedes estar sola pero aprende también a disfrutar de ello.
No te veas fea, gorda, o demasiado flaca.
Importa el contenido, no el estuche.
Amate mucho, imagínate feliz, la mente es un imán y todo lo que desees y pienses como por arte de magia lo atraerás.
No te sientas menos que otra mujer, ella puede ser más en algunas cosas, pero tu tendrás tus virtudes en otras.
Recuerda amar la vida, con sus días de sol, con sus días nublados, con sus tormentas eléctricas, es la vida y está para gozarla, disfrutarla a cada instante, en cada momento.
Llena tu mochila de bellos recuerdos y deja los malos a un costado del camino y ahora, frente al espejo, sonríe, observa lo lindo de tu cuerpo y destácalo y luego mira tu interior: el poder está en ti.
Puedes elegir:sentirte bella y amada o fea con una vida sin sentido.
Puedes elegir:darte otra oportunidad de ser feliz o esperar con tristeza que tu vida se apague.
Puedes elegir:la alegría o la tristeza.
Puedes elegir:cerrar los puños y pelear o perder todas las esperanzas.
Fíjate metas y lucha por ellas.
No te sientas egoísta si dedicas parte de tu tiempo a algo que te gusta y que te hace feliz.
La vida no se mide por el tiempo que respiras sino por los momentos que te quitan el aliento.
Autor: Desconocido

domingo, 8 de marzo de 2009

El mago dentro de nosotros


En todos nosotros existe un mago.
Este mago lo ve y lo sabe todo.
El mago está más allá de los antónimos luz y oscuridad, bien y mal, placer y dolor. Todo lo que el mago ve tiene sus raíces en el mundo invisible.
La naturaleza refleja los estados anímicos del mago. Puede que el cuerpo y la muerte duerman, pero el mago siempre está despierto.
El mago posee el secreto de la inmortalidad. Los magos son videntes.
¿Qué es lo que ven?
La realidad en su conjunto y no en sus muchas partes. Empecé a observar la energía que toda persona irradia. Para entonces, la disposición fisica de la carne y los huesos ya casi había perdido toda su importancia, y pronto vi mundos dentro de mundos en todas las personas con las que me encontraba.
Entonces me percaté de que “toda cosa viva es el Universo entero, sólo que vestida con un disfraz diferente”.
Llegará un día en que te darás cuenta de que “Dentro de ti puede encontrarse el Universo entero, y entonces serás un Mago.
Como mago, tu no vives en el mundo, sino que el mundo vive en ti”.
Esta persona independiente de ti con la que parece que estás hablando no es independiente de ti. “Somos una única persona, y en el nivel donde somos una única persona, ninguno de tus problemas existe”.
Dedica tiempo a meditar no sobre lo que ves, sino sobre ¿por qué lo ves?
La primera lección se reduce a lo siguiente:
“Mira más allá de tu Yo limitado para ver tu Yo Ilimitado!
Perfora la máscara de la mortalidad y encontrarás al mago.
El mago está dentro de ti y solamente allí. Una vez le hayas encontrado, tú también serás un vidente. Pero lo que tú puedes ver se manifiesta en su momento, paso a paso. Antes de la visión está la sensación de que en la vida hay algo más de lo que estás viviendo.
Es como una vocecita que susurra: “Encuéntrame”.
La voz que llama está desprovista de emoción, es pacífica, contenta dentro de sí misma… y escurridiza. Es la voz del mago, pero es también tu propia voz.
Los aforismos de Merlín actúan con sutileza, como el agua que va penetrando la tierra. Esta primera lección habla de encontrar al “mago” y apreciar su punto de vista que es muy diferente del punto de vista que adopta la mente o las emociones.
Las emociones sienten y reaccionan. Son inmediatas, como los tentáculos de una anémona de mar, que responden instantáneamente a las sensaciones.
El dolor causa contracciones emocionales; el placer hace que te extiendas y te sientas liberado. La mente en cambio, actúa de forma mucho menos inmediata. Lleva un inmenso fichero de recuerdos que revuelve de modo constante. compara lo nuevo con lo viejo y pronuncia un veredicto: esto es bueno, aquello es malo; esto vale la pena repetirlo, aquello no.
Así pues, las emociones dan una respuesta inmediata, sin pensarlo antes, a cualquier situación de la misma manera que un bebé sonríe o llora espontáneamente.
La mente consulta su banco de recuerdos y da una reacción retardada.
El “mago” no tiene ninguna de estas reacciones, ni la inmediata ni la retardada…
Merlín sencillamente es.
“Ve el mundo y le deja ser lo que sea”.
Por consiguiente, “al aceptar el mundo tal como es, el mago lo contempla todo bajo la luz de la aceptación propia, que es la luz del amor”.
Sin silencio no hay espacio para el mago. Sin silencio no puede haber ninguna apreciación real de la vida, que en sus tejidos interiores es tan delicada como un capullo de rosa cerrado. Cuando los mortales acudían a pedirle consejo a los magos, les empujaba el hecho de haberse fijado en que los magos no viven con miedo.
Los magos aceptan, incluso reciben con alegría, lo que les sucede, sea lo que sea.
Mirad dentro de vosotros mismos, donde hay sólo paz.
Así que el primer paso para entrar en el mundo de Merlín consiste en: “Reconocer que existe… eso es suficiente”
Cabe que tus emociones participen en esta oleada de desconfianza, ansiedad aburrimiento, escepticismo, desprecio… lo que sea.
No opongas resistencia a estos sentimientos. Son simplemente viejas y habituales maneras de escoger con cuidado. Tu mente adquiere importancia rechazando cosas desagradables.
Lo que cabe preguntarse es si las tácticas de la mente dieron resultado. Puede que logre hacerte inteligente, pero la “mente no reune las condiciones necesarias para hacer que te sientas feliz, satisfecho, en paz contigo mismo”.
Merlín no discute con la mente.
Todos los debates se generan pensando, y el mago no piensa. El mago ve.
Y esa es la clave de lo milagroso, porque lo que “puedas ver en tu mundo interior harás que exista en el mundo exterior.

El Camino de la Sabiduría - Deepak Chopra

viernes, 6 de marzo de 2009

Silencio de amar



Si supieras, lo que pasa en mi,me comprenderías mejor.
Si pudieras tocarme sabrías que mis manos,saben acariciarte con ternura y pasión.
Si tan solo fuera posible tu presencia, sabrías que te quiero y te extraño.
Si tan solo miraras mis ojos,sabrías que no mienten y que saben mirarte con amor.
Si pudieras dejar que tu corazón,se habrá por mí, inventaría mil formas de tenernos.
Si tan solo me dejaras,posar mi mirada en esos ojos que tanto anhelo mirar.
Si tan solo dejaras,que tus labios recorran mi boca,y me enseñen a besarte.
Si pudiera pedir un deseo,desearía robarme tú corazón y hacerte presa de mi pasión.
Si supieras que te amo.
¿Qué harías mí amor?

jueves, 5 de marzo de 2009

Si mis manos pudieran deshojar la luna




Yo pronuncio tu nombre en las noches oscuras,
cuando vienen los astros a beber en la luna y duermen los ramajes de las frondas ocultas.
Y yo me siento hueco de pasión y de música.
Loco reloj que canta muertas horas antiguas.
Yo pronuncio tu nombre,en esta noche oscura,y tu nombre me suena más lejano que nunca.
Más lejano que todas las estrellas y más doliente que la mansa lluvia.
¿Te querré como entonces alguna vez?
¿Qué culpa tiene mi corazón?
Si la niebla se esfuma,¿qué otra pasión me espera?
¿Será tranquila y pura?
¡¡Si mis dedos pudieran deshojar a la luna!!

Federico García Lorca

miércoles, 4 de marzo de 2009

Amargarse la vida es facil


Es relativamente frecuente encontrarnos con personas instaladas en la amargura, en la tristeza, el pesimismo y el desinterés.
Todos conocemos a personas empeñadas en encontrar el lado negativo de todo lo que pasa a su alrededor: son los pesimistas tenaces.
Cualquiera de nosotros tiene motivos, casi cada día, para preocuparse o entristecerse., pero estropearse la vida a propósito es una habilidad que se aprende, no es suficiente con sufrir experiencias negativas.
COMO VIVIR EN LA AMARGURA Y LA INFELICIDAD:
- Create problemas, y si no tienes bastante con los tuyos asume como propios los de los demás, y recréate en ellos.
- Llena tu vida de complicaciones reales o ficticias y concede gran importancia a todos los sucesos negativos.
- Piensa que siempre tienes la razon, todo es blanco o negro, y solo existe una verdad absoluta: la tuya.
- Rechaza de entrada lo que digan los demás.
Si la idea o propuesta no es 100% tuya, deséchala, seguro que no te aportará nada.
- Vive obsesionad@.
Elige un acontecimiento suficientemente negativo de tu memoria, conviértelo en recuerdo imborrable y tráelo a tu mente una y otra vez, hasta que solo vivas para pensar en ello.
Así, los acontecimientos cotidianos no absorberán tu atención.
- El presente no merece la pena, piensa siempre en el futuro.
Aplaza el disfrute de los placeres de este o aquel momento, porque no puedes saber lo que te deparará el futuro.
Confórmate con lo malo conocido y no te arriesgues ante lo bueno por conocer.
- Tortúrate pensando en todo lo negativo que te podría ocurrir dentro de unos años.
- Jamas te perdones.
Llegarás a un punto en el que tan solo sentirás autocompasión.
Piensa que tú eres el únic@ responsable de lo que te ocurre y nunca creas que hay situaciones que escapan a tu control.QUE HACER PARA NO DEJARNOS INVADIR POR LOS PENSAMIENTOS NEGATIVOS
- Reflexionar sobre la influencia que nuestros pensamientos o interpretaciones tienen sobre nuestras emociones y conductas.
- Identificar los pensamientos que nos hacen sentir mal en una situación determinada.
Una vez identificados, debemos controlarlos, objetivarlos, anotarlos en un papel y asociarlos a las circunstancias que los crearon, para reflexionar sobre ellas.
- Analizar estos pensamientos para ver hasta qué punto se corresponden con la realidad y en qué grado nos afectan.
- Finalmente, busquemos pensamientos alternativos a los que nos hacen sentir mal, estos deben ser racionales y positivos.

lunes, 2 de marzo de 2009

La casa de los mil espejos

La casa de los mil espejos
“Se dice que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, había una casa abandonada.
Cierto día, un perrito buscando refugio del sol, logró meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa.El perrito subió lentamente las viejas escaleras de madera. Al terminar de subirlas se topó con una puerta semi-abierta; lentamente se adentro en el cuarto. Para su sorpresa, se dio cuenta que dentro de ese cuarto habían 1000 perritos más, observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos.
El perrito comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco.Los 1000 perritos hicieron lo mismo.Posteriormente sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos.
El perrito se quedó sorprendido al ver que los 1000 perritos también le sonreían y ladraban alegremente con él.Cuando el perrito salió del cuarto se quedó pensando para si mismo:“¡Qué lugar tan agradable… voy a venir más seguido a visitarlo!”
Tiempo después, otro perrito callejero entró al mismo sitio y se encontró en el mismo cuarto. Pero a diferencia del primero, este perrito al ver a los otros 1000 perritos del cuarto se sintió amenazado ya que lo estaban viendo de una manera agresiva.
Posteriormente empezó a gruñir, obviamente vio como los 1000 perritos legruñían a él.
Comenzó a ladrarles ferozmente y los otros 1000 perritos le ladraron también a él.
Cuando este perrito salió del cuarto pensó:“¡Qué lugar tan horrible es éste… nunca más volveré a entrar allí!”.
En el frente de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía:
Todos los rostros del mundo son espejos.
Decide cuál rostro llevarás por dentro y ese será el que mostrarás.
El reflejo de tus gestos y acciones es lo que proyectas ante los demás.Las cosas más bellas del mundo no se ven ni se tocan, sólo se sienten con el corazón.
Anónimo

domingo, 1 de marzo de 2009

Cuento de felicidad


En cierta ocasión se reunieron todos los Dioses y decidieron crear al hombre y la mujer; planearon hacerlo a su imagen y semejanza, entonces uno de ellos dijo: esperen, si los vamos a hacer a nuestra imagen y semejanza, van a tener un cuerpo igual al nuestro, fuerza e inteligencia igual a la nuestra,debemos pensar en algo que los diferencie de nosotros, de no ser así, estaremos creando nuevos dioses. Debemos quitarle salgo, pero, Que les quitamos?
Después de mucho pensar uno de ellos dijo: ya se!, vamos a quitarles la felicidad, pero el problema va a ser donde esconderla para que no la encuentren jamás. Propuso el primero.
Vamos a esconderla en la cima del monte mas alto del mundo; a lo que inmediatamente repuso otro:no, recuerda que les dimos fuerza, alguna vez alguien puede subir y encontrarla, y si la encuentra uno, ya todos sabrán donde esta.
Luego propuso otro: Entonces vamos a esconderla en el fondo del mar, y otro contesto: no, recuerda que les dimos inteligencia, alguna vez alguien va construir una esquina por la que pueda entrar y bajar y entonces la encontrara.
Uno mas dijo:
Escondámos la en un planeta lejano a la Tierra. Y le dijeron:No, recuerda que les dimos inteligencia, y un día alguien va a construir una nave en la que pueda viajar a otros planetas y la va a descubrir, y entonces todos tendrán felicidad y serán iguales a nosotros.
El último de ellos, era un Dios que había permanecido en silencio escuchando atentamente cada una de las propuestas de los demás dioses, analizó en silencio cada una de ellas y entonces rompió el silencio y dijo: creo saber adonde ponerla para que realmente nunca la encuentren, todos voltearon asombrados y preguntaron al unísono: A donde?
La esconderemos dentro de ellos mismos, estarán tan ocupados buscándola fuera, que nunca la encontrarán. Todos estuvieron de acuerdo, y desde entonces ha sido así, el hombre se pasa la vida buscando la felicidad sin saber que la trae consigo.