miércoles, 11 de febrero de 2009

La luciernaga


Fugaz e indómita,
la luciérnaga esquivó la pinza
de dos dedos pequeños
y se posó a sólo un paso del par de ojos negros
que la miraban con no poco recelo.

-- Mamá ...
Este bicho alado que lleva un farol colgado
y anda por las noches
con su luz prendiendo y apagando,
¿lo podría poner como lamparita en el cuarto?

-- Noooooo Malena !
Ese bichito llamado luciérnaga,
sólo en libertad enciende su linterna...

-- Si tu lo encarcelas,
y pretendes que sólo para ti su luz haga brillar
con el correr de los días... morirá.
Mejor, déjala volar en libertad
disputándole a la luna su luminosidad !!

No hay comentarios: