martes, 2 de junio de 2009

Una lagrima

Una lagrima es eso que humedece los ojos del mundo, y que el mundo se empeña en ocultar.
Es eso que nos tragamos tantas veces por soberbia, por orgullo, por demostrar fortaleza y queda atorada en la garganta, apretada en el corazón comprimiéndo lo todo.
Es tan profunda que no sabemos con certeza de dónde nace, ni si podrá morir alguna vez.
A veces una lagrima cicatriza una herida, lava una pena y ablanda el corazón
Una lagrima es un recuerdo, una angustia, una desesperación, una interrogante.
Una lagrima puede ser a veces el comienzo del perdón, la primera luz de la rectificación, que hace estrechar una mano.
Una lagrima puede ser rebeldía o arrepentimiento.
Odio. Amor, luz o sombra.
Una lagrima puede ser el sueño desvanecido que rozo nuestros párpados o el amor perdido que aun esta dulce, húmedo.
Una lágrima es a veces la gota mágica que hace cambiar por dentro, cuando tenemos que pagar nuestra cuota de dolor, la lagrima ayuda.
Cuando la derramamos en el corazón querido, o en la intimidad de la amistad la lagrima une, estrecha, funde.
La lagrima transforma enseña, disuelve los rencores, las espinas las malas yerbas que van creciendo e impidiendo acercarse, abrazarse, comprenderse.
La lagrima descubre, El que ignora los motivos por los que las derraman, no te conoce.. !! Dichosos los que saben llorar!!!

1 comentario:

Azahar dijo...

que razon tienes, dichosos los que sabean llorar, aunque el motivo sea tan doloroso pero hay que sabe llorar.